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"La fuente de
lo jondo" (1986) Cante: El Pele
Guitarra:
Vicente Amigo |
"Poeta de
Esquinas Blandas", (1990)
Guitarra:
Vicente Amigo |
"Canto"
Cante: El Pele
Guitarra:
Vicente Amigo |
Biographie en espagnol:
Manuel Moreno Maya “El Pele” nace en Córdoba un día
del mes de enero de 1954 en el seno de una familia gitana por los
cuatro costados. A través de ella le llegan a El Pele los primeros
impulsos flamencos, las primeras semillas jondas que habrían de
germinar en ese corazón gitano y musical de El Pele, un personaje
importantísimo para la historia del flamenco que en estos momentos
se escribe para un nuevo milenio.
Desde muy pequeño busca en reuniones y tablaos, los
escenarios para mostrar su arte y para llevar dinero a su familia.
El Cordobés, que por aquellos años reinaba en el planeta de los
toros y de las fiestas, fue quien lo bautizó con el nombre con el
que ya tiene un sitio de honor en el gran libro del flamenco.
Con apenas 15 años obtiene en Cabra (corría el año
1969) el Primer Premio Cayetano Muriel con lo que empieza a destacar
como revelación en el panorama flamenco de la época. Al año
siguiente, 1970, consigue el “Melón de Oro” en Montalbán y así,
entre recitales, fiestas en tablaos y concursos por los terrenos de
la novillería flamenca llega al Concurso Nacional de Arte Flamenco
de Córdoba donde consigue nada menos que el Premio Nacional “La
Serneta” por soleá y el de “Pastora Pavón” por bulerías.
Hacer un recorrido por el itinerario flamenco de El
Pele es descubrir una importantísima trayectoria artística que va
mucho más allá del simple triunfo en un festival o de la conquista
de una afición cualquiera en cualquier peña del mapa flamenco, con
todo lo que ello lleva –y El Pele también ha recorrido estos caminos-
de prestigio y de consideración artística.
Pero El Pele ha hecho más. Su intuición musical, sus
conocimientos artísticos y su personalidad buscadora de nuevas
formas y de nuevas modas arrancando siempre de las raíces más puras
del flamenco, lo han llevado a compartir los escenarios más dignos
del mundo con las primerísimas figuras de la música de todas las
latitudes posibles.
Un día veraniego del año 1990, el genial David Bowie
escuchó un disco de El Pele. Tan ganado quedó su arte, que decidió
llevarlo para que abriera sus conciertos. Así lo hizo en Madrid y en
Barcelona. Antes había sido Prince quien había sido ganado por el
arte gitano y jondo de El Pele. Y es que ya lo hemos dicho en otras
ocasiones, las músicas del mundo encuentran en el flamenco frescura
y pureza, mientras el flamenco, con las músicas del mundo, se
enriquece en horizontes, encuentra nuevas técnicas y comparte
propuestas expresivas.
En Coimbra participó en el 7º Festival Internacional
de Música Étnica; en el Palau de la Música de Valencia triunfó en
1994 junto a Paco de Lucía, Enrique Morente, Vicente Amigo y otros
importantes artistas flamencos, mientras que en Montreux (Suiza)
obtuvo un éxito grandioso compartiendo escenario con Manolo
Sanlúcar, con Camarón y con Lole y Manuel. Allí , Quincy Jones,
manager nada menos que de B.B. King, y padrino del Festival de Jazz
de la ciudad helvética asentada en las orillas del lago Leman, le
confesó a Manolo Bohórquez ante la actuación de El Pele: “El
flamenco no tiene que envidiarle a ninguna música del mundo, sino
todo lo contrario. Es tan completa que no necesita influencias
extrañas de ninguna otra cultura del mundo”.